LA FELICIDAD

 

Una sensación que te permite estar en paz contigo mismo, una forma de vivir la vida pensando que por más tropiezos que existan tienes la capacidad de levantarte, nadie dijo que buscar la felicidad seria fácil, pero todo depende de nosotros, si queremos realmente ser felices hay que pensar primero en nuestra propia felicidad, como obtenerla, como conservarla, como vivir felices a pesar de nuestras adversidades, la vida es un paquete de emociones : alegrías y tristezas, pero solo esta en nuestras manos elegir que emociones queremos que permanezcan en nosotros, una vida llena de alegrías por más dura que sea tu situación te permite seguir adelante y saber que con la piedra que haz tropezado jamás  volverás a caer, aprendiste que la vida puede ser dura pero si tú aptitud ante ella es positiva y llena de felicidad la oscuridad de tú camino pronto vera la luz.

Las cosas mas simples son las que mayor felicidad traerán a tu vida, compartir momentos especiales con tus seres mas amados te hace sentir pleno y esa plenitud te lleva a momentos de felicidad, despertar y saber que la vida te ha dado un día mas para seguir luchando debe hacernos felices y permitirnos enfrentar cualquier obstáculo, la vida no es un cumulo de felicidad constante y permanente pero si  nos enfrentamos a ella con aptitud ganadora muchos momentos  de felicidad llegaran a nosotros, son esos instantes que permiten que tu instancia en esta mundo valga la pena.

     Para ser feliz solo basta con saber que ella depende de ti, que solo tú eres capaz de hacer grandes cosas si confías en tus capacidades, ella  es interna no externa, no depende de lo que tienes sino de lo que eres. ( ADRIANA MEZA)

El efecto "ELVIRA"en las personas

     Muchos habrán visto alguna vez, la comiquita  “Elvira” de los Loony Tunes, esa niña hiperactiva que asfixiaba con tanto amor exagerado a las mascotas, pues les digo muchos de nosotros tenemos ese mismo comportamiento, de una forma u otra podemos llegar a ser seres asfixiantes y consumidores de tanto cariño exagerado, habrán quienes lleguen a pesar, que exceso de cariño no existe, que el exceso de amor, no existe, porque sencillamente cuando amas demasiado no existen esas denominaciones.

     Particularmente creo que si, cuando queremos a alguien le demostramos nuestro cariño, es totalmente cierto, pero existen extremos y limites como todo en esta vida, y creer que amar sin dejar ser libre a los demás ,es lo mejor que hacemos, no solo me refiero a las relaciones de pareja que ya todos sabemos lo ahogante que puede llegar a ser alguno cuando cree que todo el universo de aquella persona solo tiene que girar alrededor  del otro, me refiero también  a aquellos amigos que buscan controlar tus pasos, tu día a día, pensando que así tendrán un poder sobre ti, aquellas personas que desean que hagas lo que ellos quieren porque esa es la única salida, muchos de éstos  comportamientos quizás sean de una forma inconsciente, pero están allí, y los hacemos sin darnos cuenta del daño que pueden causar.

      Creer que a través del control absoluto de los demás, podemos ser poderosos, que la sumisión del otro debe ser absoluta, es entrar a una callejón sin salida que puede causar irremediables daños, así como “Elvira” que de tanto cariño exagerado piensa que sus mascotas están felices cuando realmente viven un calvario a su lado, y lo peor de todo al final terminan huyendo porque es insoportable convivir con emociones que llegan a lo exagerado, a lo extremista.

     Es mi visión,  debemos demostrar nuestro amor y cariño hacia los seres más queridos, pero dejándolos ser libres, que  experimenten diversas  emociones, que compartan con otros seres, que vivan cosas diferentes,  se trata de dejar un espacio a la intimidad del otro; ellos regresaran a ti porque sabrán que a tu lado también experimentaran emociones diferentes e inigualables.

     La libertad es una sensación que te permite creer que puedes logar grandes cosas en la vida, porque no existen barreras que lo impidan, no existe alguien que te limite a seguir tú camino.     

ADRIANA MEZA